biografía ficticia

La maldición de las Graham

El sueño de las mujeres Graham era meter un tanto en un partido de la final femenina del condado. Parecía[…]

En 1981, Antonia Lipovetzky, natural de Trujillo, revolucionó el mundo del rugby y de la danza contemporánea sin proponérselo cuando,[…]

Del rugby, deporte noble, Mariana quiso saber normas, reglas, estatutos… preguntó a su hermano Asier, forward guapo pero bruto. “Fácil”, contestó[…]

Margot y Embargo Robledales estaban rotundamente en contra del matrimonio, pero allá cada cual con sus contradicciones. Una mañana se[…]

– La blusa que María llevó el domingo pasado al baile (con un resto de carmín, que no ha salido).[…]

Siempre habían ido por delante. Con siete años cursaban bachillerato. En química aprendieron que las flatulencias se componen, principalmente, de[…]

Jacqueline la Fatalista, faraona de tahúres, tenía el firme convencimiento de que todo cuanto acontece aquí abajo es un mero[…]

Lavanda Sterling siempre andaba preocupada por el futuro de los demás. Cada mañana se sentaba en la terraza de su[…]

Es costumbre entre los cartógrafos introducir errores en los mapas para evitar plagios. Un puente inventado, una calle imaginaria… Es[…]

Cuando Varushka Medvedev era pequeña, sus padres tenían escasos recursos, pero soñaban con viajar. Y cuando por fin lo consiguieron,[…]