–Es que no lo veo claro. –Ten un poco de fe, mujer. –Es que me da a mí que no[…]
Leer más
Una imagen. Cien palabras
–Es que no lo veo claro. –Ten un poco de fe, mujer. –Es que me da a mí que no[…]
Leer más—Salta. —¡No! —Salta, te digo. —¿Estás loca? ¿Quieres que me mate? —¿Cómo te vas a matar? Estamos en un sueño.[…]
Leer más– ¿Qué dices? – Que me quiero volver al pueblo. – ¿Te has vuelto loca? – No. Estoy cansada. No[…]
Leer másVerano es que todo el mundo esté haciendo la siesta y tú no puedas hacer ningún ruido ni irte lejos[…]
Leer másDespierta. Ya está aquí el zumbido, ¿lo oyes? Ahora suena más redondo, ¿lo puedes oír? No te hagas el dormido,[…]
Leer másManténganse en silencio, por favor. El velo que separa los dos mundos es muy delicado. Nos enfrentamos a fuerzas desconocidas,[…]
Leer másLlegó a la sala número 5, intentando no llamar la atención. Despacio, se acercó al cristal. La observó. Fría. Inmóvil.[…]
Leer más– ¿A qué estáis jugando?- preguntó el niño. –¿Quién?– contestó la niña mayor. – Vosotras tres. –Pero ¿a cuál de nosotras[…]
Leer másDaisy no me gusta, pero es la única niña que me habla en este pueblo espantoso al que nos ha[…]
Leer más«A ti no te toca, que estás gorda y contigo no podemos». I ti ni ti tiqui… Anda ahí y[…]
Leer más