—Toda la vida esperando… El día que me casé también tuve que esperar a mi marido —comentó en voz alta.[…]
Leer más
Una imagen. Cien palabras
—Toda la vida esperando… El día que me casé también tuve que esperar a mi marido —comentó en voz alta.[…]
Leer másOs avisamos y no nos creísteis, como siempre que una niña os dice algo que parece imposible. Nos miráis con[…]
Leer más—Salta. —¡No! —Salta, te digo. —¿Estás loca? ¿Quieres que me mate? —¿Cómo te vas a matar? Estamos en un sueño.[…]
Leer másJacqueline la Fatalista, faraona de tahúres, tenía el firme convencimiento de que todo cuanto acontece aquí abajo es un mero[…]
Leer másSentirse solo desde que uno tiene recuerdo. Jugar solo. Leer solo. Pasear solo. Estudiar solo. Salir solo. Vivir solo. Siempre.[…]
Leer másDespierta. Ya está aquí el zumbido, ¿lo oyes? Ahora suena más redondo, ¿lo puedes oír? No te hagas el dormido,[…]
Leer más– Llego tarde. – Ya te dije que no había ninguna prisa. – Aun así… me hubiera gustado llegar antes.[…]
Leer más– ¡Otra vez! ¿Por qué no me dejan en paz? ¿Qué quieren de mí, Madame Lola? – No lo sé.[…]
Leer másAsí que estás muerto. No pasa nada, yo voy a ayudarte, ven, cógete de mi mano. No tienes cuerpo pero[…]
Leer másAntes de que entres, quisiera aclararte que no siempre rompo las tazas tan bien, se me ha caído leyendo porque[…]
Leer más