Infancia

Luces blancas, espectrales, ¿adónde vais? ¿No sabéis que erráis el destino?

Aquí germina la felicidad. Juegan protegidas tras las mullidas tapias del jardín de una casa almidonada. Tuvieron la suerte de cara.
Allá afuera son los desarraigados, los que no tienen madre ni cobijo, ni libros, ni tan siquiera patria. Los perdieron en un mar-cementerio o bajo los escombros de una escuela hecha añicos, o en mitad de la calle, cuando bombardearon un verano que apenas despuntaba. Y al cruzar la frontera, niños desposeídos.

Todos igual de niños.
Volved a vuestro infierno, malditos; dejad en paz a la inocente infancia.ç

Sol

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