—Por ahí asoman ya.
—No se ve nada. Es como si se hubiera derramado leche arriba.
—Pero ahí se ve algo. ¡Mira!
—No sé por qué llevamos paraguas. No sirven contra la niebla.
—Oh, servirán, servirán.
—¿Vas a liarte a paraguazos?
—Si no hay más remedio…
—Pero ¿estás segura de que vendrán?
—¡¿Pues no te digo que los estoy viendo?!
—De todos modos, no servirá de nada.
—¿Y qué hacemos aquí, entonces? ¿Por qué has venido?
—La cuestión no es por qué he venido. ¡La cuestión es por qué no me voy!
—¡Pero si te digo que están ahí! ¡Míralos!
Etiquetas: diálogo, magia y sobrenatural